En atención a las peticiones de algunos hermanos que asistieron a Pentecostés el pasado martes 15 de mayo en UNE, pongo a su disposición el texto de la predicación que realicé después de Vivir la Eucaristía, Alabanza, Adoración, y posterior clamor del Espíritu Santo:
Hermanas y hermanos, Pentecostés es pasado, Pentecostés es
presente, Pentecostés es futuro; hoy es Pentecostés para ti, para mí, para nosotros
hoy es Pentecostés.
Meditaremos a cerca
del Espíritu Santo en tres períodos
de la historia humana, que podemos definir en 3 palabras: “Sobre”, “Con”, “En”,
en el Antiguo Testamento el Espíritu se posó sobre personas seleccionadas y permaneció
con ellos por un período determinado (Jue 14,19).
En los Evangelios está
representado como el que mora con los discípulos en la persona de Cristo
(Jn 14,17).
Desde el segundo capítulo de Hch de los apóstoles en
adelante se habla del Espíritu Santo como la persona que está en los creyentes
que forman el pueblo de Dios (1 Cor 6,10).
En Gn 1,1 Dios crea el cielo y la tierra y el Espíritu de Dios
aleteaba sobre las aguas, en (Gn 2,7) el Señor Dios formó al hombre del polvo
de la tierra, le insufló en sus narices en hálito de vida
El Espíritu Santo obraba antes de la creación del mundo,
luego renovó y alimentó a su creación; estuvo activo tanto en el mundo natural
como en su pueblo, guiándolo, liberándolo por medio de jueces, profetas, reyes
y anunció que en el futuro vendría el Ungido por el Espíritu.
En los cuatro Evangelios la Obra del Espíritu Santo se centra
en Jesucristo.
El Dios hombre fue concebido en (Lc 1,26-38) encontramos el
misterio de la Anunciación y Encarnación de Jesús en el seno de la Santísima
Virgen María.
El Espíritu bajó como una paloma del Cielo y se posó sobre
Jesús el elegido por Dios, el Cordero, de ello da testimonio San Juán quien
dijo yo “he visto al espíritu descender… (Jn 1,32-33) fue butizado. Luego Jesús movido por el Espiritu de Dios expulsó demonios
(Mt 12 27-28), además sano y liberó, Jesús lleno del Espíritu Santo y conducido por Él fue
llevado al desierto y tentado (Lc 4,1), y siguió cumpliendo la voluntad del Padre; Jesús siempre la cumplió.
Por el mismo Espíritu se ofreció a si mismo como Expiación
por los pecados (Heb 9.11) y fue Resucitado por el mismo Espíritu (Rom 8,11) y
bajo la unción del Espíritu Santo dio instrucciones a sus Apóstoles (Hch 1,2).
Antes de Pentecostés se mostró activo entre los apóstoles lo
sabemos Jesús dijo a Nicodemo “El que no naciere del agua y del Espíritu no
puede entrar en el reino de Dios (Jn 3,5)
Jesús se presentó en medio de sus discípulos y les dijo la
paz esté cono vosotros … Como el Padre me ha enviado, también yo os envío a
vosotros. Después sopló sobre ellos y les dijo Recibid el Espíritu. Ese soplo
hace alusión al Gn. cuando Dios insufló en las narices del hombre.
Y viene la Promesa del Agua Viva. Bautismo el que tenga sed
que venga a mi, el que cree en mí que beba, lo dice la Sagrada Escritura, de
sus entrañas brotarán Rios de Agua Viva, refiriéndose al Espíritu que habrían
de recibir los que creyesen en Él; pues aún no había sido glorificado. Sigue la
Ascensión de Jesús al cielo (Hch 1,9 - 11)
Pentecostés Estaban todos… “1.Cuando
llegó el día de Pentecostés, estaban todos reunidos en el mismo lugar.2. De
repente vino del cielo un ruido, como el de una violenta ráfaga de viento, que
llenó toda la casa donde estaban, 3.y aparecieron unas lenguas como de
fuego que se repartieron y fueron posándose sobre cada uno de ellos.4.Todos
quedaron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en otras lenguas,
según el Espíritu les concedía que se expresaran.” (Hch 2, 1-4)
Más adelante en el verso 17 los último días “17. Escuchen lo que sucederá en los últimos días, dice Dios:
derramaré mi Espíritu sobre cualesquiera que sean los mortales. Sus hijos e
hijas profetizarán, los jóvenes tendrán visiones y los ancianos tendrán sueños
proféticos.18.En aquellos días derramaré mi Espíritu sobre mis siervos y mis
siervas y ellos profetizarán.19.Haré prodigios arriba en el cielo y señales
milagrosas abajo en la tierra.20.El sol se convertirá en tinieblas y la luna en
sangre antes de que llegue el Día grande del Señor.21.Y todo el que invoque el
Nombre del Señor se salvará.” (Hch 2, 17-21).
Hermanos, que maravilloso el Amor de Dios se revela en cinco
acontecimientos pasados; Todos son componentes esenciales del Evangelio cristiano:
La Encarnación, La Expiación; La Resurrección,
La Ascensión y Pentecostés. Hay un Sexto componente que aún pertenece al futuro
La Segunda Vendida de Nuestro Señor Jesucristo, pero mientras vuelve, sabemos que hay demonios sueltos, rondándonos buscando a quien devorar
y para librar esa batalla tenemos el poder del Espíritu Santo para reprimir la
maldad y hacer el bien.
Para que vivamos con el entusiasmo que el Don del Espíritu Santo
nos comunica es necesaria una conversión,
transformación interior, un arrepentimiento sincero de corazón, pues la promesa
del Espíritu Santo, del Abogado, del Paráclito, Consolador, Defensor, Ayudador
es para nosotros para nuestros hijos, para nuestros familiares, conocidos y
para todos los que están lejos, para todos los que el Señor está llamando
ahora. Hoy no vivimos en la era de promesa, hoy seremos testigos de su actuar de que
Jesús vive, hoy en UNE estamos reunidos personas de todos los departamentos del
país, y el Ruido del viento será en el corazón de cada creyente: que comienza a
alabarlo, a vivir según el Espíritu, a hablar de Jesús. Él el Espíritu de Dios se une a nuestro espíritu
que quiere que otros también sean renovados; somos la base del pueblo en el que
la alegría, la paz, el amor, el gozo, la amabilidad se integran porque es Dios
en el hombre que ha recibido el Vino Espiritual por eso cantamos, danzamos,
aplaudimos lo exaltamos con alborozo, llenos del Espíritu Santo viviendo el
vino de la alegría de Jesús en medio de nosotros. Es Dios en el corazón, en los
labios en la vida transformando los corazones donde mora el Espíritu Santo.
Si el espíritu del que resucitó a Jesús de entre los muertos
habita en vosotros, el que resucitó a Cristo Jesús de entre los muertos
vivificará también nuestros cuerpos mortales por obra del espíritu que habita
en vosotros (Rom 8-11) de modo que el está en Cristo, es una criatura nueva (2
Cor 5.17)
En Él vivimos nos movemos y existimos así lo dijo San Pablo.
Para finalizar veamos la Relación con Dios Padre: lo podemos
llamar Padre ABBÁ.
Relación con Cristo: La
Resurrección
Al tener la experiencia del resucitado podemos dominar nuestra condición débil, vencemos al pecado.
El amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que se nos ha dado y llenos del Él. Vamos a compartirlo: en nuestras familias, con los amigos, grupos de oración, en nuestros trabajos en donde estemos, por que así se construye iglesia, aquella que nació en Pentecostés.
Continúen gozándose con el Espíritu Santo, Bediciones.
Les he comparido la predicación realizada y algunas de las imágenes y apartes del video que dan cuenta del evento.
Viviendo la Eucarístía |
Danzando para el Rey de Reyes |
Alimentándonos |
Recibiendo al Rey de Reyes |
Llegada al Templo de izquierda a derecha: Juan Camilo, Raúl Pinilla, Luis Fernando Gaviria, Evangelina Díaz, Oliva Díaz. |
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