LLANTO ALEGRÍA Y MUCHO GOZO

LLANTO ALEGRÍA Y MUCHO GOZO se vivió en AMIGOS EN ORACIÓN al celebrar pentecostés por tercer año consecutivo "El Espíritu Santo de Dios actúa en nosotros" con estas palabras dio apertura el gran evento siendo las 2:00 de la tarde inicio la alabanza y posteriormente el predicador RAÚL PINILLA realizó una intervención, la cual mantuvo a todos los asistentes participando en las oraciones, reflexiones e invocaciones al Espíritu Santo, cerca de las 5:00 p.m., hubo un gesto carismático muy especial, posteriormente compartieron bebida caliente y pasabocas.

La gran calidad del sonido, una delicada decoración, ambiente de espiritualidad y profesionalismo de todos los que intervinieron generó un ambiente festivo. A continuación comparto apartes de las intervenciones.

EL ESPÍRITU SANTO DE DIOS ACTÚA EN NOSOTROS

Pentecostés es fiesta para nosotros que somos miembros de la Iglesia de Jesucristo. Nunca olvidemos que el Espíritu Santo está en nosotros, pues lo hemos recibido del Padre a petición de Jesucristo, el Espíritu Santo se hace presente cuando fuimos engendrados, por el bautismo participamos de la muerte y resurrección de Jesús, en la confirmación nos hacemos soldados de Cristo incorporados a la iglesia, “Pentecostés fue la confirmación de los apóstoles. Nuestra confirmación es el pentecostés de cada uno de nosotros…nos da la fuerza para ganar en la lucha, nos hace vencedores, no cobardes, para testificar que Cristo resucitó, que Él está vivo, fuimos ungidos recibimos el crisma por eso nos llamamos Carismáticos”. Por nuestra libertad podemos tener al Espíritu Santo, siempre inactivo e inclusive alejarlo de nosotros por nuestra mala vida en pecado.

 (Hch 1-8)  “pero recibiréis poder cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo; y me seréis testigos, a la vez, en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra”

Pentecostés es una llamada a abrir los corazones a las muchas inspiraciones, y luces que el Señor Espíritu Santo forma y hace crecer a Jesús en nuestra vida, Da: Poder para vencer el pecado, el don de la Oración, el don de la Palabra, Amor para Perdonar, (reconciliarnos) y así Evangelizar porque Él nos lo prometió “Recibirán Poder y serán mis testigos en…” TESTIGOS GENUINOS.

Abrámonos prontamente a Él a su acción, para que anime toda nuestra vida cristiana y nos guie hacia Dios Padre, hacia Jesucristo, y hacia nuestros hermanos con quienes estamos llamados a formar la gran familia de Dios la iglesia. Que la invitación  que hizo el papar Pablo VI al iniciar el concilio Vaticano II nos ayude a renovar su presencia en nosotros.  Y especialmente en aquellos que nos visitan para celebrar pentecostés en este grupo de AMIGOS EN ORACIÓN  perteneciente a la Renovación Carismática Católica y así puedan alimentarse del entusiasmo  y de la alegría espiritual. (Hch 2. 1-5) "1 Al llegar el día de Pentecostés, estaban todos reunidos en el mismo lugar.2 De pronto, vino del cielo un ruido, semejante a una fuerte ráfaga de viento, que resonó en toda la casa donde se encontraban. 3 Entonces vieron aparecer unas lenguas como de fuego, que descendieron por separado sobre cada uno de ellos. 4 Todos quedaron llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en distintas lenguas, según el Espíritu les permitía expresarse. 5 Había en Jerusalén judíos piadosos, venidos de todas las naciones del mundo."

 (Hechos 2, 17-18). "Sucederá que en los últimos días, dice Dios, derramaré mi Espíritu sobre toda la humanidad; los hijos e hijas de ustedes comunicarán mensajes proféticos, los jóvenes tendrán visiones y los viejos tendrán sueños. También sobre mis siervos y siervas derramaré mi espíritu en aquellos días y comunicarán mensajes proféticos." 

No podemos limitarnos a decir “!ven Espíritu Santo!,  ven Espíritu creador!” tenemos que ser fervorosos en el Espíritu como nos lo pide el Apóstol en Rm 12.11 y entregarle sin  reservas nuestra vida a quien nos ama con amor divino y por amor vive en nosotros.

Muchos se preocupan exclusivamente por sus dones y carismas. Esta visión del Espíritu Santo no es exacta. Debemos fijarnos Primero en la persona divina del Espíritu Santo, después debemos apreciar sus funciones  y luego  agradecer sus Regalos y así gozar de la prodigiosa y multiforme acción que Él realiza en toda la iglesia y en cada uno de sus miembros. También debemos recibir con gratitud y consuelo los carismas que regala según su voluntad ya que son útiles para su iglesia. Si tenemos carismas podemos verlos como una herramienta pues recordemos que la cabeza es Dios y nosotros somos sus miembros, debemos dar futo “como la vid”.

Dios busca un pueblo que tenga hambre del Espíritu Santo, pasión por conocerlo, san Pablo vivió tremendas experiencias con el Señor, durante su ministerio palpó a diario lo sobrenatural sin embargo su mirada y anhelo más profundo estaban en la persona de Dios ¡su meta era conocer a Cristo! Y por esa pasión estaba dispuesto a dejarlo todo y así  llego a considerar todo lo demás como basura.

¡Preocupémonos por que el Señor Espíritu Santo entre en nuestra vida!. Y así en UNE viviremos una renovación, un rejuvenecimiento de la iglesia de la región de oriente de la Zona Episcopal Pastoral San José y de aquí  se beneficiará el mundo. Debe darse de nuevo una espiritualidad como la del comienzo de la iglesia, deben abrirse de nuevo los labios cerrados a la oración, al canto, a la alegría al testimonio. Para que arda el fuego del primer Amor. Como nos invitaba Juan Pablo II. Tu puedes dejar que Dios se manifieste a través de tu vida, deja que el poder de Dios te impacte y la Unción del Espíritu Santo se derrame en ti, y transforme  tu vida para que seas bautizado con Espíritu Santo y Fuego; si lo quieres; porque el Espíritu Santo no obliga a nadie, tu decides haces uso de tu libre albedrio.

Puedes tener una relación personal con el Espíritu Santo y así este territorio de la Zona Episcopal Pastoral San José será para Cristo, pues el Espíritu Santo es quien transforma las vidas, renovando sanando, liberando y restaurando. Dios  bendice a los que lo buscan con un corazón sincero. “buscad al señor mientras pueda ser hallado” IS 55,6., el Espíritu Santo nos sella, imprime un carácter en cada uno de nosotros como seguidores de Jesucristo.

Herman@s,  es hora de buscar al padre  Jn 4,23 dice “Pero llega la hora, y ya estamos en ella, en que los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad. La adoración es mucho más que palabras y posturas corporales, es reconocerle a Él como señor ya no somos nosotros el centro sino Él. La adoración es entrega es sacrificio de amor es un estado del corazón, el  alma que se rinde a Dios Padre, Hijo salvador y Espíritu santificador. ¡Vamos a adorarle…!

Fuentes. Varias